Hoy, tres de mayo, entre ajetreos parroquiales por la celebración del primer turno de primeras Comuniones de los niños y otras actividades, he tenido un momento para hojear un folleto que escribí el año 2006.
En sus 92 hojas recopilé las homilías que prediqué con cariño en la fiesta de la Santa Cruz de Sololá, cuando se llevaba de una familia a otra, para ser guardada, y se la festejaba con solemnidad y alegría.
Releer este librito me ha traido preciosos recuerdos de tantos amigos que hoy estarán felices celebrando a la Santa Cruz. Ella se lo merece todo. Feliz fiesta, amigos sololatecos.
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