Servidor, que de verdad es de lo más corrientito, acaba de darse cuenta de que es un muy mal bicho, irrespetuoso, homófobo y demás. Y esto no es nada. Puedo ser aún peor. Ya te digo.
Leánse la ley, como he hecho yo mismo hace un rato, aprovechando que es primer viernes de cuaresma y a ver qué sacan. Primera: quizá con lo que acabo de decir esté utilizando un tono que algunos podrían considerar vejatorio. Apercibimiento y multa de entre 300 y 3.000 euros.
Sigo. Servidor lo único que dice es que los niños tienen su cosita y las niñas la suya, y esto es así desde el mismo momento de la creación, porque Dios nos creó hombre y mujer. Segunda. Afirmar esto es ofensivo. Y ya voy con reiteración, porque es la segunda. Pues multa de 3.000 a 20.000 euros, amén de otras sanciones.
También digo que si se me ofrece como catequista un señor o señora con declarada condición homosexual y comportamientos en contradicción pública con la doctrina de la Iglesia, le voy a decir claramente que no. Supongo que estoy de nuevo en falta grave y nueva reincidencia. De nuevo de 3.000 a 20.000 euros. Item más, si viene al caso, pienso afirmar en la homilía que, según el catecismo de la Iglesia Católica, los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados, lo cual podría ser interpretado como atentar contra su dignidad, creando un entorno intimidatorio, degradante u ofensivo para la misma, y constituiría ya una falta muy grave, con multa de 20.001 a 45.000 euros.
Más jorobado lo tengo si me llega una persona que se siente con problemas de orientación sexual y me pide orientación y ayuda para terapia a fin de modificar esa que considera orientación errada. Para la comisión de esta infracción será irrelevante el consentimiento prestado por la persona sometida a tales terapias. ¿Cómo me voy a negar a hablar y orientar y ayudar si así me lo pide? Pues es muy grave el asunto. Tanto que supone multa de 20.001 a 45.000 euros además de otras sanciones.
Imaginen, porque es así, que un colectivo, el que sea, me pide la cesión de un local de la parroquia para tener un encuentro, y hasta ofrecen un donativo, y que servidor dice que no. Lo tienen facilito: basta con acusarme de que digo no porque son un colectivo LGTB y servidor tiene que demostrar -el mundo al revés- que no, que no es por eso. Se ha cambiado la carga de la prueba: tendré que demostrar que no soy culpable, porque de lo contrario me van a caer de 3.001 a 20.000 euros de multa cuando menos, ya que parece que voy reincidiendo bastante.
Y para colmo me permito escribir este post que suena a cachondeo y que algunos podrán decir que lleva su puntito de mala uva. No pasa nada. Otros miles de euros y si no, a galeras. Total ya…
Lo dicho: este post me puede salir carísimo. Ciscarte en la Madre de Dios y hacer mofa y befa del crucificado no es que sea gratis, es que tiene premio.
Publicar un comentario