Hace una semana puse en la Red la novela titulada: El hombre que nunca votó. Deseo dar las gracias a todas las personas en número de más de seis mil visitas y descargas, que los amigos lectores han realizado en los últimos siete días.
Estoy totalmente abrumado por esta avalancha de amigos que nunca pude sospechar antes de colgar esta novelilla. Muchas gracias a todos. Que Dios se lo pague.
Los ecos de las lecturas de bastantes personas han dejado sus comentarios colgados en los dos Blogs que administro, El Olivo y La Semilla.
Otros, muchos más, han optado por el correo electrónico, donde han dejado sus opiniones dignas de tener en cuenta para futuras obras que puedan salir de mis dedos sobre el teclado del ordenador.
He constatado que los lectores han asumido el hilo conductor de la novela y han sabido meterse en los personajes y los hechos que se cuentan en ella.
También, he sabido recibir las criticas feroces que algunos han dejado en la bandeja de entrada del correo. Algunos, han llegado, hasta, alegrarse de que ya tienen algo que echar a la hoguera en la próxima noche de San Juan. Tendrán que quemar su ordenador o el soporte digital donde hayan tenido acceso a la novela.
Por lo tanto, acabo, dando las gracias a todos sin distinción por gastar su tiempo en leer la obrilla que por primera vez he podido firmar.
Sigo recomendando su lectura:
El hombre que nunca votó
Prologada por Juan Manuel de Prada
http://marianojv.awardspace.com/novela.html
Tomás de la Torre Lendínez
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