¡Y cómo me alegro, y cuantas gracias doy a Dios, y con qué ganas le pido ayuda al inolvidable y grande Juan Pablo II! ¡Cómo recuerdo las veces que tuve la suerte de verle de cerca, de asistir a alguna de sus impresionantes celebraciones! Y... sus últimos días, tan impactantes, tan conmovedores...
Hoy se aprobó el milagro para su canonización y ya solo falta la aprobación final del Papa Francisco y el anuncio de la fecha ¡Quien pudiera estar en Roma ese día!
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