En todos sitios hallo mi bien, no hay ni un solo encuentro que no me beneficie infinitamente, con la única condición de no sentirme en nada superior a quien está frente a mí, aunque sea imbécil o bárbaro. No es que quiera a todo el mundo. Es lo contrario, quiero a “cada uno”, con un amor con frecuencia rudo y guerrero por necesidad.
Christian Bobin
Publicar un comentario