Curioso hecho. En el funeral del cardenal Araujo de Brasil, sueltan una paloma y ésta, teniendo toda la catedral para volar, se posa sobre el ataúd del purpurado y se queda allí. Esto parece todo un signo de santidad. La noticia aparece aquí:
Cambiando de tercio, el sellado de las puertas de los aposentos papales: otra cosa que hay que cambiar. Fijaos en la foto:
Basta ver el sellado de los aposentos en la película Ángeles y demonios para darse cuenta de que el sistema que aparece allí es más bonito, más digno y más seguro. Sellar con lacre una puerta es toda una proeza. Yo vi el vídeo y, desde luego, es para darle una medalla al que lo hace. Además, un lacre vertical en un marco es mejor no tocarlo ni con la mirada, pues es algo que siempre está a punto de caerse.
Esos sellos hay que ponerlos bien la próxima vez, si no podríamos dar sensación de debilidad. Si se nos caen esos sellos, ¿qué otras cosas no se nos caerán?
Además, si los anglicanos ponen mejor los sellos, ¿qué conclusiones sacarán los fieles? Prefiero no pensarlo.
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