13 de enero.

La Vocación de San Mateo, 1599-1600, Óleo sobre lienzo, 322 x 340 cm., (Barroco Italiano), Iglesia de San Luis de los Franceses, Roma. La bellísima escena representa el momento en que San Mateo es elegido por Cristo como uno de los Apóstoles. La mano de Cristo que señala a Mateo fue copiada por Caravaggio de la Creación de Adán de la bóveda de la Capilla Sixtina pintada por Miguel Ángel.

SÁBADO DE LA SEMANA 1ª DEL TIEMPO ORDINARIO

Primer Libro de Samuel 9,1-4.17-19.10,1.

Había un hombre de Benjamín llamado Quis, hijo de Abiel, hijo de Seror, hijo de Becorat, hijo de Afiaj, hijo de un benjaminita. El hombre estaba en muy buena posición, y tenía un hijo llamado Saúl, que era joven y apuesto. No había entre los israelitas otro más apuesto que él; de los hombros para arriba, sobresalía por encima de todos los demás. Una vez, se le extraviaron las asnas a Quis, el padre de Saúl. Quis dijo entonces a su hijo Saúl: “Lleva contigo a uno de los servidores y ve a buscar las asnas”. Ellos recorrieron las montaña de Efraím y atravesaron la región de Salisá, sin encontrar nada. Cruzaron por la región de Saalém, pero no estaban allí. Recorrieron el territorio de Benjamín, y tampoco las hallaron. Cuando Samuel divisó a Saúl, el Señor le advirtió: “Este es el hombre de quien te dije que regirá a mi pueblo”. Saúl se acercó a Samuel en medio de la puerta de la ciudad, y le dijo: “Por favor, indícame dónde está la casa del vidente”. “El vidente soy yo, respondió Samuel a Saúl; sube delante de mí al lugar alto. Hoy ustedes comerán conmigo. Mañana temprano te dejaré partir y responderé a todo lo que te preocupa. Samuel tomó el frasco de aceite y lo derramó sobre la cabeza de Saúl. Luego lo besó y dijo: “¡El Señor te ha ungido como jefe de su herencia!

Salmo 21,2-7.

Señor, el rey se regocija por tu fuerza, ¡y cuánto se alegra por tu victoria!
Tú has colmado los deseos de su corazón, no le has negado lo que pedían sus labios.
Porque te anticipas a bendecirlo con el éxito y pones en su cabeza una corona de oro puro.
Te pidió larga vida y se la diste: días que se prolongan para siempre.
Su gloria se acrecentó por tu triunfo, tú lo revistes de esplendor y majestad;
le concedes incesantes bendiciones, lo colmas de alegría en tu presencia.

Evangelio según San Marcos 2,13-17.

Jesús salió nuevamente a la orilla del mar; toda la gente acudía allí, y él les enseñaba. Al pasar vio a Leví, hijo de Alfeo, sentado a la mesa de recaudación de impuestos, y le dijo: “Sígueme”. El se levantó y lo siguió. Mientras Jesús estaba comiendo en su casa, muchos publicanos y pecadores se sentaron a comer con él y sus discípulos; porque eran muchos los que lo seguían. Los escribas del grupo de los fariseos, al ver que comía con pecadores y publicanos, decían a los discípulos: “¿Por qué come con publicanos y pecadores?”. Jesús, que había oído, les dijo: “No son los sanos los que tienen necesidad del médico, sino los enfermos. Yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”.

____________________

1. (año II) 1 Samuel 9,1-4.17-19;10,1
a) Samuel, aunque un poco a regañadientes, porque era opuesto a la petición del pueblo, unge al primer rey de Israel, Saúl.
Este joven, aunque parecía dotado de cualidades de líder (aquí se nombra su estatura, superior a la de los demás) y prometía mucho, sin embargo no fue precisamente un gran rey, porque tampoco fue una gran persona, lleno como aparece de complejos, celos y depresiones. Será mucho más famoso y decisivo su sucesor, David.
Samuel unge a Saúl como rey. La unción -un masaje con aceite- era el símbolo religioso para transmitir a una persona la ayuda y la fuerza de Dios. Como el masaje penetra en los poros de la piel y nos da bienestar y salud, así Dios quiere dar su fortaleza, su Espíritu, a los que ha elegido para una misión.
La misión la expresa así Samuel: «El Señor te unge como jefe, tú regirás al pueblo del Señor y le librarás de la mano de los enemigos».
b) La vocación es un misterio. Dios elige a personas fuertes y a personas débiles.
Muchas veces depende del temperamento y de la actitud de apertura o de cerrazón de esas personas, el que cumplan bien la misión que se les encomienda.
Saúl, por una parte, pertenecía a la tribu más pequeña, la de Benjamín. Dios elige según criterios sorprendentes (por cierto, esta tribu será también famosa por otro Saúl, Saulo de Tarso, san Pablo). Por otra parte, era un buen mozo, alto y parecía que fuerte. Es lo que el pueblo parecía pedir, sobre todo en vistas a la lucha contra los filisteos. Pero luego falló, porque su temperamento no le acompañaba, ni él se esforzó en ser fiel y tampoco los demás (incluido Samuel) le ayudaron mucho.
Dios sigue llamando. En las circunstancias familiares y sociales de cada época, Dios se sirve de pequeños acontecimientos o de palabras que parecen intrascendentes para sembrar su vocación. A Saúl, a quien su padre había enviado a recuperar unas burras que se les habían extraviado, le esperaba Dios para ungirle como rey. Todo depende de cómo sepamos responder y si alguien nos sabe decir la palabra amiga y certera que nos guíe en el reconocimiento de la voz de Dios y en la maduración de nuestras cualidades.
Sean cuales sean nuestras fuerzas y cualidades, si Dios nos ha llamado es porque confió en nosotros. Nos ha llamado para la vida cristiana y tal vez para la vocación religiosa o ministerial. El es quien nos da su Espíritu, el que nos unge para la misión, el que, a través de su Palabra, de los sacramentos y de la ayuda de la comunidad y de tantas personas, hace posible que respondamos con generosidad y fidelidad a su elección.
2. Marcos 2,13-17
a) La llamada que hace Jesús a Mateo (a quien Marcos llama Leví) para ser su discípulo, ocasiona la segunda confrontación con los fariseos. Antes le habían atacado porque se atrevía a perdonar pecados. Ahora, porque llama a publicanos y además come con ellos.
Es interesante ver cómo Jesús no aprueba las catalogaciones corrientes que en su época originaban la marginación de tantas personas. Si leíamos anteayer que tocó y curó a un leproso, ahora se acerca y llama como seguidor suyo nada menos que a un recaudador de impuestos, un publicano, que además ejercía su oficio a favor de los romanos, la potencia ocupante. Un «pecador» según todas las convenciones de la época. Pero Jesús le llama y Mateo le sigue inmediatamente.
Ante la reacción de los fariseos, puritanos, encerrados en su autosuficiencia y convencidos de ser los perfectos, Jesús afirma que «no necesitan médico los sanos, sino los enfermos; no he venido a llamar justos, sino pecadores».
Es uno de los mejores retratos del amor misericordioso de Dios, manifestado en Cristo Jesús. Con una libertad admirable, él va por su camino, anunciando la Buena Noticia a los pobres, atendiendo a unos y otros, llamando a «pecadores» a pesar de que prevé las reacciones que va a provocar su actitud. Cumple su misión: ha venido a salvar a los débiles y los enfermos.
b) A todos los que no somos santos nos consuela escuchar estas palabras de Jesús. Cristo no nos acepta porque somos perfectos, sino que nos acoge y nos llama a pesar de nuestras debilidades y de la fama que podamos tener.
El ha venido a salvar a los pecadores, o sea, a nosotros. Como la Eucaristía no es para los perfectos: por eso empezamos siempre nuestra celebración con un acto penitencial.
Antes de acercarnos a la comunión, pedimos en el Padrenuestro: «Perdónanos». Y se nos invita a comulgar asegurándonos que el Señor a quien vamos a recibir como alimento es «el que quita el pecado del mundo».
También nos debe estimular este evangelio a no ser como los fariseos, a no creernos los mejores, escandalizándonos por los defectos que vemos en los demás. Sino como Jesús, que sabe comprender, dar un voto de confianza, aceptar a las personas como son y no como quería que fueran, para ayudarles a partir de donde están a dar pasos adelante.
A todos nos gusta ser jueces y criticar. Tenemos los ojos muy abiertos a los defectos de los demás y cerrados a los nuestros. Cristo nos va a ir dando una y otra vez en el evangelio la lección de la comprensión y de la tolerancia

Anuncios

Let's block ads! (Why?)

16:07
Secciones:

Publicar un comentario

[facebook][blogger]

SacerdotesCatolicos

{facebook#https://www.facebook.com/pg/sacerdotes.catolicos.evangelizando} {twitter#https://twitter.com/ofsmexico} {google-plus#https://plus.google.com/+SacerdotesCatolicos} {pinterest#} {youtube#https://www.youtube.com/channel/UCfnrkUkpqrCpGFluxeM6-LA} {instagram#}

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.
Javascript DesactivadoPor favor, active Javascript para ver todos los Widgets