Sabéis que como afición me gusta pintar. Hace unos meses hice una gran excepción y pinté un retrato de un buen amigo mío al que estimo mucho. Hoy os ofrezco el resultado con la esperanza de que algún jeque árabe me haga el encargo de mi vida. Es broma. En realidad, cuando uno pinta, uno busca que los demás puedan ver esa pintura. Esa es la razón por la que hoy pongo aquí esta obra. Hoy no me alargo con este post para compensar los días en que he abusado de vuestra paciencia.
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