He leído con gusto y provecho este folleto de 80 páginas, donde se relata la vida santa de este ingeniero, que murió a los cuarenta y un año con una merecida fama de santidad, y a quien la Iglesia ha reconocido como Venerable.
Me emociona su sencillez y su amor al trabajo profesional, sus afanes apostólicos y su sincera piedad. Su entrega a Dios y su eficaz colaboración con San Josemaría en los comienzos del Opus Dei.
He disfrutado leyendo su historia y, desde ahora, me encomendaré con más fuerza a su poderosa intercesión.
Publicar un comentario