l. – Hoy no es un día para mirar al ayer, sino para mirar al mañana.
Sólo se vive bien mirando hacia adelante.
Caminar mirando hacia atrás es tropezar con los estorbos del camino.
Flickr: Bernal Saborio
2.- Hoy no es un día para llorar los días pasados, sino para sembrar las semillas de los días que tienes por delante.
No lamentes. No llores.
Las lágrimas no solucionan las cosas y además manchan los ojos y no dejan ver claro.
3.- Hoy no es un día para llorar el pasado, sino para ponerle sonrisas a los días que vienen.
4.- Hoy no es un día, tal vez, para segar y recoger, pero sí puede ser un día para sembrar, abonar, regar y luego esperar.
La siega es fruto de la espera.
5.- Hoy no es un día como los demás.
De ti dependerá que sea un día diferente.
De ti depende que sea el día más feliz de todos cuantos has vivido.
Vive de tal manera el día de hoy, que nunca lo puedas olvidar.
6. – Hoy no es un día para indecisiones.
Es el día en el que tú puedes decidir la suerte de todos los demás días de tu vida, e incluso, de la vida de los demás.
7. – Hoy no es un día para incertidumbres.
Es el día de tus certezas y seguridades, pues es el único día cierto que tienes en tus manos para ser lo que tú quieras ser y lo que Dios espera que seas.
Hoy es el único día seguro que tienes para vivir.
Clemente Sobrado C. P.
Archivado en: Vida 
Publicar un comentario