La película “Los dos papas”, que se estrena ahora, presenta a Francisco y a Benedicto XVI según el esquema progresista-conservador, imaginando su relación ya antes de la elección del primero. Sin embargo, lo que ellos mismos han dicho el uno del otro no encaja bien en ese molde.
Dirigida por el brasileño Fernando Meirelles (Ciudad de Dios, El jardinero fiel) y producida por Netflix, la película cuenta con dos conocidos actores: Anthony Hopkins (El silencio de los corderos y tantas otras), que interpreta a Benedicto XVI, y Jonathan Pryce (Juego de tronos), en el papel de Francisco.
El guion es de Anthony McCarten (La teoría del todo, El instante más oscuro, Bohemian Rhapsody), también autor del libro The Pope: Francis, Benedict and the Decision That Shook the World. McCarten estrenó en enero de este año en Inglaterra una obra de teatro con el mismo título. Se decidió a escribir esta historia al imaginarse cómo sería la coexistencia de dos papas, aunque la película recrea la relación entre los dos antes de ser elegido Bergoglio, y confronta las supuestas ideologías de uno y otro.
“Para mí es un hombre de Dios, un hombre humilde, un hombre que reza. Me sentí muy feliz cuando fue elegido Papa” (Francisco sobre Benedicto)
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Juan Ramón Domínguez Palacios
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