Rafaela, ve a preguntar a Ramona, que de esto sabe

Menuda sorpresa se llevó Ramona al ver acercarse a Rafaela a su casa. No tenían nada la una contra la otra, pero lo cierto es que su relación era apenas de hola y adiós. Fueron amigas, muy amigas, en sus tiempos jóvenes. Casi de la misma edad, juntas a la escuela y juntas en las Hijas de María y en las cosas de la parroquia, que tanto la una como la otra vivían la fe con intensidad.

Ramona no supo digerir los cambios del post concilio o los dirigió a su modo y manera y se le quedó en la cabeza que lo importante era ser buenos y hacer las cosas si te salían de dentro. Coincidió el casarse y venir los hijos, andar más justa de tiempo y la necesidad de colaborar todos para sacar adelante la familia, que el campo, sobre todo antes, no daba para grandes alegrías, así que lo de la Iglesia quedó para algún entierro de compromiso y ya ni las fiestas.

Sorpresa descubrir que a su casa llegaban Rafaela y Joaquina, dos beatas de libro con las que apenas tenia relación.

-          Pero bueno, ¿y esta sorpresa?

-          ¿Cómo estás? Veníamos a pedirte un favor de parte de D. Jesús, el párroco.

-          ¿De parte del párroco? ¿A mí? Pero bueno, si en algo puedo ayudar…

-          Es que, verás, tenemos que responder a una encuesta y dice D. Jesús que es una cosa de la que tú entiendes mucho, que es cosa de campo y medio ambiente.

-          ¿De medio ambiente? Vale, como queráis.

Rosquillas y café que no falten. En la salita de Rafaela se acomodaron los cuatro: las buenas tres mujeres y el mismísimo D. Jesús. El asunto consistía en una encuesta que acababa de llegar a la parroquia en la que se preguntaba por su sensibilidad ecológica, y en eso Ramona algo tenía que decir, ya que su familia toda la vida trabajó en el campo y hasta sus hijos habían comenzado alguna cosa de esas ecológicas.

A ver, comenzó D. Jesús, se trata de responder a unas preguntitas para ver si somos una parroquia comprometida ecológicamente.

-          Ah… -exclamó Ramona- ¿Qué ahora os dedicáis a esto? Llevo años que ni piso la iglesia no siendo en cosa de entierro de compromiso. Cuando me habéis pedido venir por una cosa de campo pensé que a lo mejor queríais relanzar la hermandad de San Isidro, organizar alguna romería o contar con los agricultores para algo de la fiesta. Lo que nunca me podía imaginar es que ahora lo que os preocupa es la huella de carbono, la certificación ambiental de la lejía y el detergente, y los huertos ecológicos. No quiero ni pensar la cara que pondrían D. Manuel y la señorita Ana María si se encontraran hoy con esta bobada. ¿Sabéis lo que os digo? Que cada vez me alegro más de haberme marchado de la Iglesia.

-          Pero Ramona… -exclamó D. Jesús-

-          Ni Ramona ni leches, D. Jesús. Mire, si me toca el corazón con las novenas de antes, el Santísimo, las Hijas de María o el mes de mayo, lo mismo hasta me lo pensaba. Pero llamarme, después de tantos años, para preguntarme por la capa de ozono o por los herbicidas es un cachondeo. Por cierto, Mariano y yo utilizamos herbicidas y el que no esté de acuerdo, que se venga con la azada y arranque cada hierbecita a mano.

Let's block ads! (Why?)

02:14

Publicar un comentario

[facebook][blogger]

SacerdotesCatolicos

{facebook#https://www.facebook.com/pg/sacerdotes.catolicos.evangelizando} {twitter#https://twitter.com/ofsmexico} {google-plus#https://plus.google.com/+SacerdotesCatolicos} {pinterest#} {youtube#https://www.youtube.com/channel/UCfnrkUkpqrCpGFluxeM6-LA} {instagram#}

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.
Javascript DesactivadoPor favor, active Javascript para ver todos los Widgets